Y siguen los empates para la selección Nacional. Está vez, fue capaz, el más “duro” y criticado por todos, especialmente por ser ya el quinto consecutivo y además, porque se esperaba mucho más de la Selección Argentina teniendo en cuenta a su rival, uno de los últimos de la tabla de posiciones y que inclusive en comentarios de sus propios futbolísticas decían que tenían muy pocas probabilidades de ganar o empatar frente al equipo de Riquelme y compañía, palabras salidas del propio Solano. Y además, fue el empate más criticado porque la Argentina jugó uno de los peores partidos de los últimos que viene disputando, y en especial, pasaron de ser percibidos jugadores como Messi, Agüero y Riquelme, los creadores de fútbol del equipo y los que pueden cambiar el resultado de un partido en una sola jugada como lo hicieron la fecha pasada frente a Paraguay.
Hablando del partido disputado en Lima, Perú fue quien tomo la iniciativa y empezó a presionar a la Argentina hasta meterla en su propio campo, haciendo que los defensores cometan errores groseros al querer salir jugando por abajo, cosa que dificulto que el balón les llegase a Riquelme y Messi por ejemplo, que se ubico hasta de volante central para recibir el balón. Luego, llegaría la lesión de Jonás Gutiérrez y sería reemplazado por el volate defensivo de Boca Juniors, Sebastián Battaglia, generando así un mediocampo más combativo y con mayor capacidad para recuperar el balón pero con menos potencial ofensivo por las bandas, ya que los cuatro jugadores que ocuparon el mediocampo eran originalmente volantes de marca, a pesar de que Gago y Cambiasso también se desempeñasen un poco mejor con el balón. La falta de volantes ofensivos, de no poseer gente por los costados que llegue hasta el área contraria y desborde enviando centros para los delanteros, y principalmente la falta de un centro-delantero, hizo que la Argentina no tuviese un peso ofensivo considerable y Agüero quedará como único referente de ataque, poco pudiendo hacer en los choques cuerpo a cuerpo con los defensores Peruanos, perdiendo en la mayoría de las veces o superado en velocidad por la fuerte defensa de Perú.
En el segundo tiempo Perú salió al contra-ataque y Juan Pablo Carrizo, titular por la lesión de Roberto Abbondanzieri en el partido pasado frente a Paraguay, tuvo que demostrar en dos ocasiones su gran potencial como futuro arquero de la selección, desviando dos balones de sumo peligro para el arco Argentino, y de esta manera, Perú parecía acercarse a la apertura del marcador. Un Messi demasiado individualista, tratando de gambetear a cualquier rival que se le cruzará en el camino en vez de realizar pases hacia los costados empeoraron las cosas para el plantel Argentino. Luego llegaría el ingreso de Germán Dennis, delantero de la Lazio de Italia, por el “Kun” Agüero, que poco pudo hacer en todo los minutos que estuvo en cancha, aunque también poco se le puede reprochar. Pero llegarían los goles, ambos sobre el final del partido. Primero sería la selección comandada por Gago la que marcaría y abriría el marcador, y digo comandada por Gago ya que este fue el que mejor se ofreció para jugar en toda la etapa complementario y el que originó la jugada del gol, definida por Esteban Cambiasso con ayuda de un defensor Peruano en el ´82, pero luego llegaría el empate Peruano por intermedio de Johan Javier Fano en el ´90, luego de que Lionel Messi perdiese un balón (otro de los tantos que perdió a lo largo de todo el partido), que definiría luego de una gran jugada de Vargas por izquierda, y determinando así el resultado del partido que quedaría cerrado en 1 a 1.